martes, 10 de septiembre de 2013

6to año. Información sobre Realismo Mágico.-

REALISMO MÁGICO.- (Apuntes de “El Realismo Mágico” de Yolanda Argudín Vázquez, Catedrática de la UNAM.  FERNÁNDEZ editores, México 1992)

El  REALISMO MÁGICO LATINOAMERICANO responde a un deseo de autonomía para el arte, a la defensa de la libertad imaginativa y a la expresión de muchas necesidades sociales y artísticas que a su vez exigen procedimientos narrativos nuevos.
Los escritores rechazan la  denuncia social directa, pero han encontrado procedimientos adecuados para hacerse oír en el contexto de la literatura contemporánea:
<1)   Desarrollan intensamente el cuento;
<2)   Logran una fusión entre localismo y universalidad;
<3)   Usan un lenguaje asequible a cualquier lector;
<4)  Insertan los problemas particulares de los latinoamericanos en lo característico del hombre contemporáneo.
LITERATURA: posibilidad de conocimiento, de exploración filosófica, de participación.
LENGUAJE: se transforma, al narrar se juega con los diferentes puntos de vista del narrador, se rompe con la linealidad del relato, se hace cómplice al lector.
PRINCIPALES INTEGRANTES DEL REALISMO MÁGICO: Jorge Luis Borges, Alejo Carpentier, Gabriel García Márquez, Juan Carlos Onetti, Juan Rulfo, Carlos Fuentes, Octavio Paz, Julio Cortázar, Mario Vargas Llosa, Ernesto Sábato, José Lezama Lima, augusto Roa Bastos, José donoso, Jorge Amado.

El término REALISMO MÁGICO fue muy usado en Alemania y Austria durante el expresionismo (1920), para explicar que la realidad se puede transformar en un mundo mágico sin que ésta se deforme, mediante el procedimiento de destacar lo incongruente de ella.
La yuxtaposición de escenas y detalles realistas con situaciones inverosímiles, conforma el REALISMO MÁGICO en la LITERATURA.
El año 1935 puede señalarse como punto de partida de esta literatura en Hispanoamérica con la aparición de “Historia Universal de la Infamia” de Jorge Luis Borges.
Entre los años cuarenta y cincuenta en Hispanoamérica se produjo PROSA comparable con la mejor del mundo, conformada por la preocupación de estilo y la transformación de lo común y cotidiano en una fuerza escondida, tremenda e irreal. Se trata de un arte inquietante por el asombro y la sorpresa que suscita.
Características básicas:
<1)   El relato se desliza dentro de una perspectiva infinita (intemporal);
<2)    Lo irreal sucede;
<3)  El texto no está cargado de efusiones líricas ni descripciones innecesarias;
<4)  Los escritores se apegan a la realidad para evitar que la ficción llegue al campo de lo sobrenatural como en los cuentos de hadas por ejemplo;
<5)   La narración conduce a la confusión pero en medio de la claridad;
<6)   Rechazo a la sensiblería;

<7)  El REALISMO MÁGICO es sutil, estético y sofisticado; de estilo preciso y escueto.

"DEL AMOR Y OTROS DEMONIOS", GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ


HOLA OTRA VEZ!  ESTE LINK ES PARA LEER LA NOVELA DESDE AQUÍ.  NO LA IMPRIMAN, ESPEREN LAS INDICACIONES DE CLASE.

http://sitiosescolares.miportal.edu.sv/10618/biblioteca%20virtual/OBRAS%20%20LITERARIAS%20DE%20LA%20A..Z/M/Marquez,%20Gabriel%20-%20Del%20Amor%20y%20otros%20Demonios).pdf

6to. año. De la narrativa del siglo XIX a la del siglo XX. Prof. Rossana Migliónico













6to AÑO, PRESENTACIÓN DE GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ.-

Hola alumnos de 6to, comparto con Uds., el link de una muy buena presentación del escritor que estamos estudiando, realizada por un grupo de 6to del Colegio del Rosario, generación 2012, alumnos de la Prof. Alexandra Cabrera. 
Vaya un GRACIAS muy grande a todos los que hicieron posible esta presentación!!!!


 http://prezi.com/m4q90apgw2-h/biografia-gabriel-garcia-marquez/,

viernes, 30 de agosto de 2013

5to. año, Información sobre Boccaccio.





Hola alumnos, en este link encontrarán información necesaria para resolver actividad sobre Boccaccio que realizaremos la próxima semana. No la impriman, tomen apuntes de aspectos relevantes.
Saludos
Silvana

lunes, 5 de agosto de 2013

6TO. AÑO. ETAPAS EN LA POESÍA DE PABLO NERUDA.-

ETAPAS EN LA POESÍA DE PABLO NERUDA
El volumen descomunal de la obra de Pablo Neruda está estrechamente vinculado con las etapas de su vida. Su obra evoluciona según crece él mismo con los años, ya que proviene de la acumulación de sus experiencias personales y sociales, se adapta a las circunstancias vividas, y expresa sus más hondos sentimientos. Su poesía es un mosaico de ideas y tendencias porque Neruda siempre estuvo abierto a todas las influencias.
Su amplia producción se divide en cinco etapas o ciclos (Oviedo, T3; 350, Chang- Rodríguez; 392). Cinco ciclos que abarcan la lírica de amor, el hermetismo de introspección existencialista, la escritura de compromiso social y la épica, la poesía no demasiado profunda y la anti poesía (Garganigo; 430). Éstas son las divisiones según la temática de su obra pero, como Neruda es un poeta cíclico que pasa por fases que comprenden varios libros (Oviedo, T3; 350), unos libros representativos de cada ciclo  no se pueden excluir de este trabajo.
El primer ciclo abarca la publicación de los Veinte poemas de amor y una canción desesperada (1924) (Chang-Rodríguez; 392, Oviedo, T3; 350). A los diecinueve años este joven de provincia se transforma en personaje célebre que lanza un estilo nuevo, moderno, cargado de erotismo, cambiando el lenguaje del amor en el mundo hispanoparlante (Garganigo; 430-431). Los rasgos que caracterizan este ciclo son la línea postmodernista y unos toques de origen vanguardista (Oviedo, T3; 351). Los escritores del postmodernismo vuelven la mirada hacia la vida interior y revelan un sentimentalismo acentuado porque analizan los sentimientos pero usando un lenguaje sencillo (Ayuso de Vicente; 306).

El segundo ciclo abarca la Residencia en la tierra II (1935). Esta obra es la síntesis magistral del surrealismo (Cabrales; 175). El surrealismo exalta el papel de las fuerzas más oscuras de la mente humana y del subconsciente. Las obras surrealistas reflejan un mundo de inquietudes, plagado de imágenes fantásticas (Ayuso de Vicente; 364).

La publicación de Canto General (1950) marca el tercer ciclo en la evolución poética de Neruda (Chang-Rodríguez; 393). Este es el momento de su gran poesía social, de su compromiso americano y su intervención en las pugnas políticas de la época (Oviedo, T3; 366). Es el poema más importante de este período. Neruda convierte su verso en arma de combate e instrumento de solidaridad con los demás hombres (Cabrales; 175). Reniega las anteriores estéticas e inaugura así el nuevo género de la poesía testimonial. A través de mil páginas organizadas en XV largos cantos recupera la tradición de la poesía épica para narrar la epopeya de la América prehispánica y su posterior sometimiento al colonialismo europeo y norteamericano (Cabrales; 175).
El cuarto ciclo es él de las Odas Elementales (1954) que surgen de la profunda convicción de Neruda que los objetos más humildes constituyen una forma singular de la belleza, la belleza práctica y útil, la que brota de la vida diaria. En esta etapa Neruda no quiere contar sino hablar como si la poesía fuese un hecho cotidiano (Oviedo, T3; 373). De ahí que los calcetines, la alcachofa, el diccionario, la cebolla estén descritas afectuosamente: para captar las preocupaciones del hombre sencillo y resaltar el valor de lo aparentemente insignificado (Chang-Rodríguez; 393). En cierta medida las odas son una respuesta o una alternativa a la consigna de crear personajes e historias “constructivos” (Oviedo, T3; 373).

El quinto ciclo de la obra nerudiana lo abre Estravagario (1958), colección donde predominan los ambientes irreales, la vuelta al pasado y el tono meditativo (Chang-Rodríguez; 393). El poeta brinda la ocasión de hacer la autocrítica y mostrar una benigna comprensión de sí mismo, con todos sus virtudes y defectos (Oviedo, T3; 374). Se convierte en “anti poeta” ahora capaz de reírse de sí mismo. Autoirónico y burlón, satisfecho y melancólico, contempla su propia obra como un objeto central en ella (Oviedo, T3; 374).

El arte de Neruda, de naturaleza esencialmente experimental, nunca es premeditado ni permanente. Una vez que perfecciona una nueva modalidad expresiva, la abandona para desarrollar otra y otra. Siempre consciente de sus cambios y de los cambios en el mundo en su marcha histórica, su poesía está sembrada de una serie de “poéticas”, textos que marcan el camino de su evolución como hombre y como poeta (Garganigo; 432).


miércoles, 17 de julio de 2013

5to. AÑO.- EL HÉROE EN LA LITERATURA.-


EL HÉROE EN LA LITERATURA.-
CONCEPTO
R.A.E., 1.- (de heros), entre los antiguos paganos, el nacido de dios o diosa y de una persona humana, por lo cual más que un hombre, menos que un dios. Ej : Hércules, Aquiles.
2.- Varón ilustre y famoso por sus hazañas.-
3.- El que lleva a cabo una acción heroica.-
4.- Personaje principal de toda obra literaria.
5.- Cualquiera de los personajes de carácter elevado de una epopeya.-
Diccionario AKAL de términos literarios: personaje principal de una novela o de obra teatral independientemente de que posea todos los atributos o cualidades ( Aquiles) o que carezca por completo de ellos (Lázaro de Tormes).-
ANTIHÉROE: protagonista que carece de las cualidades que se le otorgan al héroe ( nobleza, hermosura, juventud, poder…)
Lázaro de Tormes es un héroe por ser protagonista de una obra literaria, y un antihéroe por carecer de las cualidades típicas del héroe.-
EL MITO DEL HÉROE. (estructura básica)
  • Realiza un viaje
  • Es sometido a una serie de pruebas
  • Se producirá en él una transformación profunda
SOCIEDAD:
  • Factor determinante en las características del héroe
  • Cada tiempo construye su propia imagen de héroe
EL VIAJE REPRESENTA DIFICULTADES ( QUE DISTINGUIRÁN AL HÉROE DEL HOMBRE COMÚN), DE CADA TIEMPO Y ESPACIO.
COMO SI SE ESTUVIERA OBSERVANDO A TRAVÉS DE UN LENTE DE AUMENTO, EL HÉROE Y SUS HAZAÑAS SON UNA AMPLIACIÓN, UNA METÁFORA HIPERBÓLICA DEL HOMBRE Y SU TRAYECTORIA VITAL.
EL RECORRIDO ES UNA EXPOSICIÓN FÍSICA Y ESPIRITUAL A SITUACIONES NUEVAS QUE LE EXIGEN EL DESARROLLO DE NUEVAS FUERZAS Y TALENTOS.
LA SUPERACIÓN DE LAS PRUEBAS, LO CONVIERTE EN UNA PERSONA DISTINTA DE LA QUE ERA.
LOS HÉROES REFLEJAN SIEMPRE LOS IDEALES DE LA SOCIEDAD DE SU ÉPOCA. POR TAL NO EXISTE UN ÚNICO TIPO DE HÉROE. SIN EMBARGO JAMÁS PASA INADVERTIDO, SE DESTACA EN LA COMUNIDAD.

HÉROE
  • CLÁSICO-TRÁGICO
  • MEDIEVAL
  • ANTIHÉROE
  • BARROCO
  • ROMÁNTICO
  • SIGLO XX
  • POST- MODERNO

martes, 18 de junio de 2013

5TO. AÑO, INFORMACIÓN PARA NUEVO TESTAMENTO.-


JESÚS, LA FIGURA CENTRAL

Grecia tuvo en Sócrates al hombre más sabio y heroico del mundo antiguo; el mundo naciente tuvo su modelo de pureza y sacrificio en Cristo. El primero representa la última dimensión humana de un saber alcanzado con el solo ejercicio de la razón investigadora: el segundo sorprende por su conocimiento penetrante del corazón ajeno y su innato sentido de justicia.
Uno y otro subvierten la escala de valores, las costumbres y la legalidad oficiales. Uno y otro aceptan sus destinos trágicos sin negar ni envilecer sus enseñanzas y sin renunciar a la manifestación de sus palabras activas. Pero Sócrates es la clarividencia de los límites humanos; Cristo, el afán por sobrepasarlos. El sacrificio de Sócrates es un imperativo moral; el de Cristo, ofrenda y entrega gratuita. El primero ayuda a distinguir el bien, la belleza, la justicia; es un enamorado del pensamiento y del poder del Logos. El segundo, lo encarna. Sócrates muere ejemplarmente, atestiguando la grandeza del sabio consecuente con su práctica. Cristo suscita prosélitos (seguidores), promueve mártires y despierta una nueva piedad. Un rasgo común los hace igualmente excepcionales y admirables: ambos fueron ágrafos, es decir, nunca escribieron. Sólo Cristo una vez, en excepción que confirma la regla, escribió. Pero lo hizo sobre la tierra. (Juan 8: 1-11).
Sócrates es hombre de un solo nombre y sólo por él se lo conoce; Cristo admite pluralidad de nombres, cada uno de los cuales señala un atributo revelado en sus obras o en sus palabras. Es por lo pronto el Mesías, el Salvador, el Redentor. Sus contemporáneos le llamaban Rabbin Jesús; los romanos, el Nazareno; sus vecinos, perplejos, hablaban del carpintero, hijo de María que se había vuelto predicador.
Fray Luis de León, en un libro insuperable discurre sobre catorce nombres y da nutrida explicación de cada uno. Tal multiplicidad admite términos opuestos: Cristo es llamado Brazo de Dios, justiciero y fuerte; y es también Cordero, paciente y frágil víctima propiciatoria. Examinada con atención,
su historia parece tejido de contradicciones. Nació en un pesebre, su cuna fue humilde, su padre, un obrero; pero él tomó para sí la misión de redimir a todos los hombres.
Su pueblo esperaba un salvador y un rey que lo elevase por sobre los demás pueblos; pero su poder no compitió con los poderes terrenos y su reino, según proclamó, no era de este mundo. Observó recta conducta, fue de trato bondadoso, alentó al pobre, al débil, al enfermo; pero despertó envidias feroces y fue blanco de la calumnia y de la traición. Decía ser testigo de la gloria divina pero recibió burlas, escarnio y tortura. Al fin, el amado por los pobres y los simples, y aborrecido por los doctores de la ley, fue condenado a esa muerte por crucifixión que la justicia imperial reservaba para los revoltosos y los delincuentes. La historia entera del pueblo de Israel se orientó en el sentido mesiánico. Cada episodio contuvo una expectativa del deseado Mesías salvador.
El Pentateuco lo previó, los profetas lo proclamaron, los reyes le aguardaron, los hombres y las mujeres auscultaron su venida. Pero cuando ese carpintero, hijo de carpintero salió al mundo, fue piedra de escándalo. Conspiraron contra él y obtuvieron su condena a muerte. Muchos lo tuvieron por profeta, y como a tal le escucharon y siguieron.
Su prédica ganó adeptos, pero también adversarios. Su sola presencia impuso un compromiso. Conociéndolo, nadie pudo esquivar la opción: había que estar con él o en contra de él. Ninguna otra figura profética del A.T. adquiere esa contundencia. Ninguna impone decisiones tan radicales ni consecuencias tan abundantes y severas. La sola lectura de las páginas neo testamentarias que cuentan su historia basta para entenderlo así.
Son sus enemigos la hipocresía y el fariseísmo. Le atacan porque comparte sus horas con los extraviados, acompaña a los publicanos1 y perdona a los pecadores. Cura en sábado –día sacro consagrado al reposo-se empeña en regenerar a los que el mundo consideraba perdidos, exalta la limpieza de corazón y la inocencia de las intenciones. No se ha de vivir-advierte-como sepulcro blanqueado, reluciente por fuera pero lleno por dentro de podredumbre. No matarás, dijo la Ley, pero él dice que aquel que concibió un mal pensamiento contra su hermano, será reo delante del tribunal. Pone en su lugar a la ley mosaica (ley de Moisés), haciendo de ella no un instrumento de opresión sino de salud interior y de libertad.
Enseña que el dios terrible y adusto del A.T es el padre pródigo en amor cuyo reino en todo momento y en todo lugar, anuncia. Pues no tiene otro norte su ministerio sino la misericordia divina.
Se hace uno con el pobre y con el que vive de su jornal.
El rostro del esperanzado puede ser el suyo y también la alegría del que ha obrado bien. Suyos son los rasgos del hombre sufriente, porque en cada padecimiento está su padecer y en cada agonía, su propia agonía.
Es el prójimo por autonomasia, el desvalido que pide amparo y aún el harto y el satisfecho a quien es necesario emancipar del egoísmo o del hastío. En el silencio de cada hombre golpeado por otros hombres está su silencio ante los flageladores romanos. En el estertor de cada moribundo están sus palabras en la cruz “¿Por qué me han desamparado?”(San Mateo, 27:6)

De PATERNAIN, Alejandro. Información sobre el Nuevo Testamento. Editorial Técnica s.r.l Nº 35 – Manuales de Literatura
  1. 1Judío que cobraba impuestos, eran odiados y temidos por el pueblo.

jueves, 16 de mayo de 2013

26 de mayo- DÍA NACIONAL DEL LIBRO.-

   "El que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho". -                          

                                                                Miguel de Cervantes Saavedra



 

viernes, 26 de abril de 2013

viernes, 19 de abril de 2013

5to, LITERATURA GRIEGA; APUNTES DE HONTANAR.-



Apuntes de LITERATURA.-   HONTANAR-LITERATURAS GRIEGA Y LATINA.-
GRECIA.- CARACTERES HISTÓRICOS Y CULTURALES
   Grecia es el punto de partida de toda la civilización occidental.- Se le ha llamado el milagro griego a la creación efectuada por la inteligencia helénica de un arte,  una ciencia y una filosofía no solamente griegos, sino universales. Los griegos nos legaron un ideal de cultura humana y en el curso de la historia no hay otro influjo espiritual tan extenso y repetido como el de la cultura helénica.
   Ya desde Horacio que reconoció que Grecia aunque  conquistada militarmente por los romanos, había conquistado, en cambio, espiritualmente a sus vencedores imponiéndoles su cultura y su arte, todos los pueblos y todas las culturas debieron reconocer su vinculación y dependencia con la cultura helénica.
   El retorno a lo clásico griego está repetido varias veces en el curso de la historia; es un retorno espiritual a las fuentes siempre fecundas del pensamiento helénico.
   En el aspecto literario, Grecia ha ejercido gran influencia sobre todas las literaturas posteriores… la literatura latina deriva de la griega, a la cual imitó.
   Durante la Edad Media la influencia griega casi desaparece, excepto la de Aristóteles. Pero existe una influencia indirecta a través de los autores latinos que son traducidos e imitados…
   En la época del Humanismo y el Renacimiento, se produce un retorno decidido hacia la literatura griega. Este movimiento tiene por causa el contacto renovado con las fuentes del pensamiento griego, y se acentúa con la venida a Occidente de los sabios Bizantinos que huyen de la invasión turca.
   En la Edad Moderna el contacto con la cultura helénica no se perdió; y actualmente sigue teniendo, en el estudio y en la enseñanza, importancia considerable, pues además de su valor histórico, la literatura griega tiene un valor estético permanente.- Es decir que no solo ha creado casi todos los géneros literarios ( epopeya, lirismo, tragedia, comedia, historia, oratoria y filosofía) sino que llevó dichos géneros a la perfección, realizando un determinado ideal de belleza, permanente e imperecedero….
CARACTERES GENERALES DE LA LITERATURA GRIEGA
Es una literatura clásica, original, popular, espontánea, normal en cuanto al orden de aparición de los géneros literarios, y regular en cuanto a la línea que representa gráficamente el proceso de realización de los valores artísticos.
1)      CLASICISMO.- la literatura griega es clásica en triple sentido:
a)      Porque ha servido de modelo a las literaturas posteriores, que la han imitado.
b)      Porque ha alcanzado la perfección en todos los géneros literarios, lo que justifica la imitación de los modelos griegos, en épocas posteriores.
c)       Porque ha realizado un determinado ideal de belleza al que se le denomina clásico y que consiste en el equilibrio armonioso de todas las facultades artísticas del espíritu humano. – Clasicismo significa aquí equilibrio, mesura, orden. En la literatura griega se concilian maravillosamente el realismo en el sentido de comprensión de la naturaleza y del hombre, juntamente con el más puro ideal de belleza…Existe perfecto acuerdo entre el fondo y la forma, entre la idea y la palabra…
2)      ORIGINALIDAD.- Los griegos no tuvieron modelos.- Son esencialmente originales.- No quiere decir esto que la cultura griega no haya sufrido influencias extrañas, porque no hay ninguna cultura absolutamente autóctona.-  La cultura griega sufrió la influencia fenicia y egipcia en la época homérica. Pero, existan o no esas influencias y sea cual fuere su grado, los griegos las asimilaron y adaptaron a su cultura, imprimiéndoles un carácter propio, distinto del de los pueblos de donde procedían.
3)      POPULARIDAD.-  La Literatura Griega es popular porque va dirigida al pueblo y es comprendido por él.-  En el siglo V, período de culminación, todo el pueblo asistía a los espectáculos teatrales.- Es una literatura popular y nacional porque expresa los sentimientos peculiares del pueblo griego, lo que es en gran parte consecuencia de su originalidad.
4)      ESPONTANEIDAD.- La literatura griega realiza el ideal clásico de belleza que obedece a determinadas normas estéticas, pero lo realiza en una forma espontánea, no intencionada. La literatura griega clásica es anterior a la formulación de las reglas estéticas.- Aunque algunos elementos normativos aparecen ya en Platón, es en realidad Aristóteles, en el siglo IV, quien en su “Retórica” y en su “Poética” concreta en reglas o preceptos estéticos los motivos que inspiran a los poetas clásicos, que con anterioridad a las reglas compusieron sus obras. Es decir que la preceptiva aristotélica es consecuencia de un trabajo de análisis sobre los elementos artísticos que espontáneamente determinaron la perfección de la poesía clásica….
5)      NORMALIDAD EN CUANTO AL ORDEN DE APARICIÓN DE LOS GÉNEROS LITERARIOS.- La literatura griega sigue la evolución normal y lógica de la inteligencia, a través de las diversas etapas de la vida humana:
   El primer género literario que aparece es la epopeya, que corresponde al período de la infancia; predomina la imaginación.
  Luego surge el lirismo, que corresponde a la juventud: predominan el entusiasmo y la expresión de los sentimientos subjetivos.
 A la madurez o edad adulta corresponden el drama y la prosa (historia, filosofía y oratoria). En el drama se presentan las pasiones humanas y la lucha del hombre contra ellas en el cumplimiento de su destino.
 Después viene la decadencia o senectud que corresponde a la época del helenismo que se caracteriza por la retórica y la ausencia de originalidad.- No es una etapa de creación sino de elaboración, de crítica y de análisis de obras anteriores.- Se asemeja al anciano que, impotente para la acción, vive del recuerdo de sus épocas de madurez y juventud….
EL PROCESO HISTÓRICO
Podemos distinguir cuatro grandes épocas en la historia de la Literatura griega:
1)      Época prehomérica.- 2.000 al 850.
2)      Época helénica propiamente dicha.- 850-322.- Se subdivide en dos períodos: jónico dórico  (850-480) y ático (480-322). Este último es el período de oro de la Literatura Griega. El centro cultural- literario es Atenas. Llega a la perfección el drama en sus dos formas: tragedia y comedia, y la prosa en sus tres géneros: historia, filosofía y oratoria.
3)      Época del helenismo.- (322 AC – 529 DC).- Se subdivide en dos períodos: alejandrino ( 322 AC- 146 AC) y greco –latino (146 AC - 529 DC)
4)      Época bizantina.- (529-1453 DC)
LA TRAGEDIA
La poesía dramática es una poesía representada.- Se representan hechos de la vida humana, mediante la acción y el diálogo entre los personajes.- En esta poesía, el autor desaparece; es de carácter objetivo; pero también en cierto sentido subjetivo, porque aparecen reflejados los sentimientos del autor en los personajes creados por él.
   La tragedia es una forma de poesía dramática que tiende a provocar en el ánimo del espectador emociones intensas, la piedad o el terror, mediante la representación de acciones extraordinarias y la intervención de personajes superiores a los hombres normales- héroes o dioses- quienes actúan bajo el impulso del destino o de las intensas pasiones.
   El concepto de lo trágico en sentido sustancial es perfectamente separable del concepto de tragedia como género literario.- en ese sentido puede hablarse por ejemplo de una novela trágica.
   Etimológicamente tragedia significa “canción del macho cabrío”. Tuvo su origen en el ditirambo, que fue adquiriendo un significado heroico y luego en el siglo VI se transformó en tragedia.
   El elemento principal de lo trágico es el pathos, que significa sufrimiento. Las torturas, tormentos, muertes, heridas no aparecen en la tragedia griega, en forma repugnante, repelente, sino artísticamente. Esto es lo que Aristóteles denomina catarsis. La catarsis consiste en una purificación de los efectos dramáticos de tal modo que pueda restablecer la serenidad o sofrosine en el ánimo del espectador.-  Es como una medicina o purga que se realiza mediante la pintura de algunas pasiones que el espectador lleva adentro de sí mismo y que actúan en la vida real.
   La tragedia suscita mediante la compasión y el terror la catarsis o purga de esas pasiones en el ánimo del espectador.
   Los sufrimientos aparecen con un fondo moral, como castigo a la transgresión de una ley divina o humana…
ORIGEN DE LA TRAGEDIA GRIEGA.- EL DITIRAMBO Y EL MITO DE DIONISOS
  La tragedia griega surge aproximadamente en el siglo VI AC.- Tiene su origen en el ditirambo, que celebra la vida del dios Dionisos y sus transformaciones. Según algunos historiadores, la tragedia tiene su origen en el ditirambo artístico o literario, forma del lirismo coral, y según otros, en el ditirambo popular lo mismo que la comedia.
   Cuando se conmemoraba la muerte del dios, los cantos eran tristes; y alegres cuando se celebraba su resurrección.
   Muchas son las versiones del mito, pero en todas ellas la vida del dios es una vida de luchas, muerte y resurrección, una sucesión de sufrimientos y de alegrías.
   El mito dionisíaco estaría inspirado en las transformaciones de la vid, interpretadas con el sentido poético y religioso del pueblo griego.
   El  nacimiento de Dionisos significa el florecimiento de la vid en la primavera; sus bodas, la fructificación de la vid durante el verano; su muerte y despedazamiento, la aparente muerte de la vid durante el invierno, para luego volver a renacer en la próxima primavera, resurrección.
   La tragedia griega está basada pues, en el sufrimiento de Dionisos y su triunfo sobre la muerte.
   Se caracteriza el ditirambo por la exaltación de los sentimientos.- esas dos fases o aspectos de la vida del dios, que celebra el ditirambo fueron los gérmenes de la tragedia y de la comedia; y la atención que le dedican los espectadores se va a convertir luego con la tragedia en una completa identificación…
   Según la tradición, Tespis en  Ática a mediados del siglo VI transformó el ditirambo- himno coral- en tragedia…
EL CORO
   El coro representa el elemento lírico dentro de la tragedia. Tanto su importancia como el número de sus integrantes ha variado según las diferentes épocas…
   El director del coro o exarconte se confunde con el actor…
   En “Las suplicantes” de Esquilo, el coro está integrado a cincuenta personas… en otras tragedias, el autor redujo el número de coreutas a doce, y Sófocles posteriormente lo elevó a quince.
   El coro que tiene gran importancia en Esquilo, la va perdiendo con Sófocles, hasta ser en Eurípides un simple adorno…
   El coro en general, exceptuando las tragedias primitivas, desempeña un papel pasivo en el desarrollo de la acción, exterioriza los sentimientos despertados en el público durante el curso de la obra.- Aconseja a los personajes, los consuela y anima.- Canta, danza y hace mímica.  
LOS ACTORES
El origen del actor estaría en la separación del exarconte del coro ditirámbico (Tespis), y como antecedente remoto podría citarse la interpretación de los aedos y rapsodas.
   Se atribuye la creación del primer actor, protagonista a Tespis, del segundo –deuteragonista- a Esquilo, y del tercero –tritagonista- a Sófocles.
   Los actores se presentaban provistos de aparatos que elevaban la estatura – coturno- y que amplificaban la voz – bocina-. Así lo requería la distancia a que estaban los espectadores…
   La máscara trágica era una careta extraordinariamente grande, provista de una peluca que cubría toda la cabeza y que generalmente tenía la frente alta, especialmente cuando se trataba de personajes importantes: héroes, reyes o dioses…
   La vestimenta del actor comprendía una túnica, el chitón, que iba del talle hasta los pies; era muy amplia…
LOS PERSONAJES
El origen de los personajes estaría en la epopeya, en los caracteres pintados por Homero y demás poetas épicos.
   En cada tragedia, los podemos clasificar en tres grupos:
1)      Los héroes, personajes principales de la obra que eran representados por los actores más importantes;
2)      Los personajes secundarios, de menor importancia, como vigía, mensajero, nodriza, heraldo;
3)      Las comparsas mudas, séquitos de guerreros o acompañamiento de pueblo.
ESTRUCTURA DE LA TRAGEDIA
   La estructura de una obra es la distribución de las distintas partes que la componen.- Además del elemento propiamente dramático, encontramos en la tragedia elementos épicos y líricos, a los cuales puede agregarse el elemento pictórico, arquitectónico y escultórico.
   El elemento épico está constituido por el asunto de las tragedias, que procede del epos, lo mismo que los caracteres de los personajes…
   El elemento lírico está constituido por las partes cantadas por el coro (estásimas) y por los personajes (monodios y dúos)…
   El elemento pictórico está representado por los decorados, el arquitectónico por la construcción del edificio del teatro y el escultórico por las estatuas, que adornaban la fachada del teatro griego en la época posterior (siglo IV).
   Vamos ahora a analizar las diversas partes que componen una tragedia y cómo se distribuyen…
   Partes líricas (a cargo del coro): el párodo, los estásimos y el éxodo.
   Partes dramáticas (a cargo de los actores, pero con frecuentes intervenciones del coro): el prólogo y los episodios.
 El prólogo, según Aristóteles, es la parte de la tragedia que precede a la entrada del coro…, está a cargo de los actores y puede ser dialogado o monologado.
   El párodo es la entrada del coro que luego se instala en la orquestra.
   Los episodios. Episodio significa etimológicamente, digresión o separación del asunto principal…
   Al principio en las tragedias primitivas, el episodio coincidía con el significado etimológico… Luego pasa lo contrario: los episodios constituyen, en realidad, lo más importante de la tragedia.
   El número de episodios era variable.- En general eran cuatro. Vendrían a ser los episodios algo así como los actos del teatro moderno…
   Los estásimos eran cantos que entonaba el coro a lo largo de la obra entre episodio y episodio.- Normalmente eran tres.
   El éxodo o retirada del coro, que tenía lugar después del último episodio ponía fin a la tragedia.
   La estructura normal de una tragedia es la siguiente:
PRÓLOGO (dramático)
PÁRODO: entrada del coro (lírico)
PRIMER EPISODIO  (dramático)
PRIMER ESTÁSIMO (lírico)
SEGUNDO EPISODIO (dramático)
SEGUNDO ESTÁSIMO (lírico)
TERCER EPISODIO (dramático)
TERCER ESTÁSIMO (lírico)
CUARTO EPISODIO (dramático)
ÉXODO: retirada del coro.
En algunas tragedias aparecía alterado el orden entre sus partes o faltaban algunas de ellas.
LA TEORÍA DE LAS TRES UNIDADES
   Se ha discutido mucho la cuestión de si el teatro debe ajustarsea las tres unidades: de tiempo, lugar y acción….
   Es inexacto atribuir a Aristóteles la formulación de la teoría de las tres unidades: no habla para nada de la unidad de lugar; la unidad de tiempo se refiere incidentalmente; la única regla que establece es la unidad de acción…
La unidad de lugar,… si bien se observaba en el teatro griego con bastante fidelidad,  pero era resultado no de la aplicación de reglas preconcebidas, sino de una necesidad…, debido a la ausencia de telón de boca no era posible representar gran cantidad de lugares…
   La unidad de tiempo.- Aristóteles se refiere a ella incidentalmente, al comprobar como hecho normal que la fábula de la tragedia…, no dura más que lo que tarda el sol en uno de sus giros, es decir veinticuatro horas; pero no hace de la unidad de tiempo una regla estricta…
En la representación de las tragedias griegas no había telón ni entreactos.- Era todo seguido, sin embargo, a veces se suponía que durante los estásimos, entre episodio y episodio, habían transcurrido algunos años.
   La unidad de acción significa que la tragedia debe desarrollar un solo asunto fundamental… Normalmente en toda obra dramática, la acción presenta tres partes fundamentales: exposición o planteo, nudo y desenlace.-
   La acción debe excitar el terror o la compasión…
   La acción realmente trágica debe ser entre amigos o parientes.- Si un enemigo mata a un enemigo nada hay de trágico.- Los personajes de las tragedias deben ser nobles, pero no extremados en virtud ni caídos en infortunio por maldad sino por algún pecado o falta cometida.-
   La peripecia es un acontecimiento que cambia más o menos rápidamente la marcha normal de los hechos, dando la solución; o bien que simplemente transforma bruscamente la situación presentada, creando una situación contraria.- Es pues un hecho anormal que altera el curso natural de la acción.
   La anagnórisis o reconocimiento consiste en que uno de los personajes que interviene en la tragedia entre en conocimiento de un hecho ignorado por él, muchas veces ya conocido por el público; o bien en que se reconozcan dos personajes.- La anagnórisis, pues, la transición de la ignorancia al conocimiento que engendra amistad u odio.

miércoles, 17 de abril de 2013

6to, "El cuervo" y otros poemas de Edgar Allan Poe


EL CUERVO  de Edgar Allan Poe.-
https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjN4It5MPiQVCLD1aOda9roMwOaktQ9w5OELYZSCJzGWDnYutXA6Bfe8vS_INkiy6lkaEa-LPUuMKR9XxOnc7r0rs145ls_vE_sL3mnVhHXA8w8F-0ycbpRwXvBxdqseGQIWs_4CmtUBOth/s1600/el+cuervo+7.jpg (   Traducción de Carlos Obligado)                                                          

Cierta vez que promediaba triste noche, yo evocaba,
fatigado, en viejos libros, las leyendas de otra edad.
Ya  dejaba, dormitando; cuando  allá, con toque blando,
con un roce incierto, débil, a mi puerta oí llamar.
“_ A mi puerta un visitante- murmuré- siento llamar;
                        Eso es todo, y nada más.”


¡Ah, es fatal que lo remembre! Fue en un tétrico diciembre;
rojo espectro enviaba al suelo cada brasa del hogar.
Yo leyendo,  combatía mi mortal melancolía
por la virgen clara y única que ya en vano he de nombrar;
la que se oye “Leonora” por los ángeles nombrar.
                         Ah! Por ellos, nada más!


Y al rumor vago, afelpado, del púrpureo cortinado,
de fantásticos errores sentí el alma rebosar.
Mas,  mi angustia reprimiendo, confortéme repitiendo:
“_Es sin duda un visitante quien llamando busca entrar,
un tardío visitante que a mi cuarto busca entrar:
                         Eso es todo y nada más”.


Vuelto en mí, no más vacilo; y en voz alta, ya tranquilo:
“_ Caballero- dije – o dama, mi retardo perdonad;
pero, de hecho, dormitaba; y a mi puerta se llamaba
con tan fino miramiento, noble y tímido a la par,
que aun dudaba  si era un golpe”. Dije; abrí  de par en par:
                  sombras fuera, y nada más.


Largo tiempo, ante la sombra, duda el ánima,  y se asombra,
y medita y sueña sueños que jamás osó  un  mortal.
Todo calla,  taciturno; todo abísmase, nocturno.
Pude allí quizás un nombre: “Leonora”, murmurar,
y, en retorno, supo el eco : “Leonora” murmurar;
                    Esto solo y nada más.


A mi cuarto volví luego. Mas, el alma toda en fuego.
Sentí un golpe, ya más fuerte, batir claro el ventanal.
“ _De seguro, de seguro- dije- hay algo, allí en lo oscuro,
que ha tocado mi persiana. Y el enigma aclara ya._
Corazón, quieto un instante! Y el enigma aclara ya._
                    Es el viento, y nada más.”


Dejo franco los batientes,- y, batiendo alas crujientes,
entra un cuervo majestuoso de la sacra, antigua edad.
Ni aun de paso me saluda, ni detiénese, ni duda;
pero a un busto que en lo alto de mi puerta, fijo está,
sobre aquel busto de Palas que en mi puerta fijo está,
                        va, y se posa, y nada más.


Frente al ave, calva y negra, mi triste ánimo se alegra,
sonreído entre su porte, su decoro y gravedad.
_ “ No eres –dije- algún menguado, Cuervo antiguo que has dejado
las riberas de la Noche, fantasmal y señorial!
En plutónicas riberas, ¿cuál tu nombre señorial?”
                   Dijo el Cuervo: “_ Nunca más”.


Me admiró por cierto,  mucho, que así hablara el avechucho.
No era aguda la respuesta, ni el sentido muy cabal.
Pero en fin, pensar es llano  que jamás viviente humano
vio, por gracia, a bestia o pájaro, quieto allá en el cabezal
De su puerta, sobre un busto que adornara el cabezal,
                    Con tal nombre: “ Nunca más”.


Pero, inmóvil sobre el busto venerable, el Cuervo adusto
supo solo en esa frase, su alma oscura derramar.
Y no dijo más,  en suma, ni movió una sola pluma
y yo, al fin: “_ Cual muchos otros, tú también me dejarás.
Perdí amigos y esperanzas: tú también me dejarás.”
                        Dijo el Cuervo : “Nunca más”.


Conturbado al oír esta cabalísima respuesta:
“Aprendió –pensé- las sílabas que repite sin cesar,
de algún amo miserable que el Desastre inexorable
persiguió ya tanto, tanto,  que por trino funeral
por reponso a sus ensueños, su estribillo funeral
                           era: “_ Nunca, nunca más.”


Y, del Cuervo reverendo, mi tristeza aun sonriendo,
ante puerta y busco  y pájaro rodé luego mi sitial;
y al amor de terciopelo, fue enlazando mi desvelo
mil ficciones , indagando qué buscaba, inmemorial.
Aquel flaco, torpe, lúgubre, rancio cuervo inmemorial
                           con su eterno “ Nunca más”.


Mudo ahora, esto inquiría; mudo ante él, porque sentía
que hasta lo íntimo del pecho me abrasaba su mirar:
esto y más fui meditando, reposándome en lo blando
del cojín violeta oscuro que ya nunca oprimirás._
El cojín – junto a mi lámpara- que ya nunca oprimirás.
                            Oh Leonora: nunca más!


Y ensoñé que en el ambiente columpiaban dulcemente,
emisarios invisibles, incensario, inmaterial.
Y exclamé: “ _ Triste alma mía: por sus ángeles te envía
El Señor, tregua _ y nepente con que al fin olvidarás!”
                          Dijo el Cuervo : “ _ Nunca más.”


“_ ¡ Ya te enviara aquí el Maldito, ya, indomable aunque proscrito_
Oh profeta o ave o diablo – dije,- Espíritu del mal_
A este páramo embrujado y a este hogar de horror colmado
te empujara la tormenta: dime, oh, dime con verdad:
en Galaad, ¿existe un bálsamo?... ¡Dime! Imploro la verdad”
                             Dijo el Cuervo “ _ Nunca más.”


“_ Por el Cielo que miramos, por el Dios en que adoramos,
oh profeta, ave o demonio, -dije,- Espíritu del mal:
dí si esta alma dolorida podrá nunca, en otra vida,
abrazar a la áurea virgen que aquí en vano  ha de nombrar.
La que se oye “Leonora” por los ángeles nombrar!”
                               Dijo el Cuervo: “_Nunca más.”


“_ ¡ Partirás, pues has mentido, o ave o diablo!” clamé erguido.
“¡Ve a tu Noche plutoniana! ¡Goza allí la Tempestad!
¡Ni una pluma aquí, sombría, me recuerde tu falsía!
¡Abandona ya ese busto! ¡Deja en paz mi soledad!
¡Quita el pico de mi pecho! ¡Deja mi alma en soledad!”
                                 Dijo el Cuervo: “_ Nunca más.”


Y aun el Cuervo, inmóvil, calla: quieto se halla, mudo se halla
en tu busto, oh Palas pálida que en mi puerta fija estás;
y en sus ojos, torvo abismo, sueña, sueña el Diablo mismo.
y mi lumbre arroja al suelo su ancha sombra pertinaz.
Y mi alma, de esa sombra que allí tiembla pertinaz.
                             No ha de alzarse, ¡nunca más!


El día más feliz
El día más feliz, la hora más dichosa, los ha
conocido mi corazón agotado y marchito; pero
siento que ha desaparecido ya mi más alta esperanza
de orgullo y de poderío.

¿He dicho de poderío? Sí. Pero desde hace
largo tiempo, ¡ay de mí! se han desvanecido
los bellos ensueños de la juventud; han pasado
ya: dejémoslos que se desvanezcan!

Y tú, orgullo, ¿qué haré de ti ahora? Otra
frente puede bien heredar el veneno que me
has dado. Que por lo menos mi espíritu permanezca
tranquilo.

El día más hermoso, la hora más feliz que mis
ojos hayan visto y hayan podido ver jamás,
mi más brillante mirada de orgullo y de poderío,
todo eso ha existido pero ya no existe; yo
lo siento.

Y si esa esperanza de orgullo y de poderío
me fuera ofrecida ahora acompañada de un
dolor semejante al que experimento, no quisiera
revivir esa hora brillante.

Porque bajo su ala llevaba una oscura
mezcla y mientras volaba, dejaba caer una
esencia todopoderosa para consumir un alma que
tan bien la conocía.

Soneto a la ciencia
¡Ciencia, verdadera hija del tiempo tú eres!
que alteras todas las cosas con tus escrutadores ojos.
¿Por qué devoras así el corazón del poeta,
buitre, cuyas alas son obtusas realidades?

¿Cómo debería él amarte? o ¿cómo puede juzgarte sabia
aquel a quien no dejas en su vagar
buscar un tesoro en los enjoyados cielos,
aunque se elevara con intrépida ala?

¿No has arrebatado a Diana de su carro?
¿Ni expulsado a las Hamadríades del bosque
para buscar abrigo en alguna feliz estrella?

¿No has arrancado a las Náyades de la inundación,
al Elfo de la verde hierba, y a mí
del sueño de verano bajo el tamarindo?